El Modelo Pedagógico de la I.E. Filiberto Restrepo Sierra refleja la fundamentación de los procesos de enseñanza y aprendizaje y está centrado en el desarrollo de competencias científicas, académicas y profesionales, con énfasis en el desarrollo humano y holístico, en el fomento de una formación integral de sus estudiantes, procurando seres autónomos, analíticos, pensantes, capaces de tomar decisiones para el bien propio, el de su familia y comunidad, logrando transformar su vida y su entorno.
Los principios pedagógicos que orientan la formación de los estudiantes de la I.E. Filiberto Restrepo Sierra, están enmarcados en aspectos sociales, culturales, científicos y humanos que determinan las directrices para favorecer los elementos pedagógicos, didácticos, curriculares y administrativos acordes con las intenciones formativas de la I.E. De esta manera, la tendencia pedagógica asume elementos de diferentes escuelas con predominio de los modelos social-desarrollista y el modelo basado en competencias, asumiendo la formación del estudiante a través de la construcción y promoción de la capacidad de aprender a aprender, lo que implica el desarrollo del pensamiento científico crítico, el análisis del contexto y las habilidades y destrezas de tipo técnico, que permitan al estudiante tomar decisiones y aportar al desarrollo de sí mismo y de su comunidad.
Las estrategias de enseñanza dentro del modelo social- desarrollista basado en competencias, buscan facilitar aprendizajes significativos, son flexibles y se adaptan a las particularidades del entorno social de cada estudiante. Propenden por que el estudiante sea el protagonista de su propio aprendizaje, que asuma una postura crítica frente a la cultura, la ciencia y la tecnología, construya conceptos y habilidades cognitivas, genere espacios de aprendizaje que propicien de manera vivencial el conocimiento de la realidad y el compromiso social y faciliten el trabajo colaborativo.
El desarrollo de competencias de los estudiantes no solo se basa en competencias técnicas y científicas, sino también en dimensiones relacionales y sociopolíticas, donde el sujeto desarrolla actitudes de reflexión frente a las acciones individuales y sociales, orientadas bajo los principios y valores institucionales la Unidad, Solidaridad, Sabiduría y Paz. Además, busca desarrollar sujetos capaces de emprender acciones de liderazgo positivo para la identificación y solución de problemas de manera creativa e innovadora usando una mentalidad estratégica para la toma acertada de decisiones; y que pueda hacer parte de un equipo y establecer con ellos una buena comunicación, una convivencia pacífica como base para el trabajo interdisciplinario.
Este nuevo modelo educativo a desarrollar, requiere ser organizado e implementado con base en el concepto de Competencias, entendiéndolo como la combinación de destrezas, conocimientos, aptitudes y actitudes, y a la inclusión de la disposición para aprender además del saber cómo, posibilitándose que el educando pueda generar un capital cultural o desarrollo personal, un capital social que incluye la participación ciudadana, y un capital humano o capacidad para ser productivo (Dirección General de Educación y Cultura de la Comisión Europea, 2004).
Las Competencias deben ser consideradas como parte de la capacidad adaptativa cognitivo-conductual que es inherente al ser humano, las cuales son desplegadas para responder a las necesidades específicas que las personas enfrentan en contextos sociohistóricos y culturales concretos, lo que implica un proceso de adecuación entre el sujeto, la demanda del medio y las necesidades que se producen, con la finalidad de poder dar respuestas y/o soluciones a las demandas planteadas (Frade, 2009 <<Frade, L (2009). Planeación por Competencias. Inteligencia educativa. México>>). Estas demandas pueden tener dos órdenes: las sociales (que deberían ser priorizadas en el contexto que enfrenta la humanidad en la actualidad) y las individuales.
Por lo anterior, el modelo educativo debe procurar organizar la enseñanza con la finalidad que los educandos logren desarrollar capacidades para resolver problemas, tanto a nivel social como personal (Aguerrondo, 2009). De esta manera, las Competencias a desarrollar contribuirán a dominar los instrumentos socioculturales necesarios para interactuar con el conocimiento, permitir la interacción en grupos heterogéneos, potenciar el actuar de un modo autónomo y comprender el contexto.
¿POR QUÉ ADOPTAR EL MODELO PEDAGÓGICO SOCIAL-DESARROLLISTA BASADO EN COMPETENCIAS?
El modelo pedagógico social-desarrollista basado en competencias tiene un enfoque social porque permite el conocimiento, la reflexión y el aprendizaje colaborativo, utilizando la lógica de las ciencias, el diálogo y una metodología basada en la solución de problemas que permiten transformar la sociedad y potenciar las diferentes dimensiones del ser humano, tiene un enfoque desarrollista porque se propone para una sociedad industrial, técnica y científica, localizada en un régimen abierto, donde el medio fundamental es la comunicación y el conocimiento, a la cual la comunidad no es ajena en estos tiempos.
Nuestro modelo pedagógico está basado en el desarrollo de competencias porque tiene como objetivo preparar a los estudiantes para enfrentar los retos que les presenta la sociedad, en el orden escolar, local, regional, nacional e internacional, y teniendo en cuenta el desarrollo de habilidades de orden actitudinal, conceptual, y procedimental; dicha formación se logra gracias a la adquisición de conocimientos y al desarrollo de las capacidades, habilidades, competencias y destrezas particulares.
La implementación de este modelo nos llevará entonces, a formar estudiantes reflexivos, críticos y propositivos, capaces de solucionar conflictos y proponer soluciones que contribuyan a mejorar su calidad de vida, la de su familia y de la comunidad en la que interactúan.