Nuestra Institución Educativa pretende lograr en sus estudiantes el pleno desarrollo de su personalidad de manera gradual y progresiva mediante la potenciación de sus actitudes, aptitudes, habilidades, destrezas y conocimientos que les permita ser competitivos en un mundo cada vez más globalizado.
La I.E. define como perfil del estudiante, una persona con las siguientes características:
- Protagonista de su aprendizaje: el estudiante se convierte en sujeto activo. El aprendizaje, por tanto, se vuelve un proceso personal: interroga y cuestiona, está activo, asume la responsabilidad de aprender, no espera a que le enseñen, ni que le digan qué saldrá en el examen, va más allá se necesita enseñar un conocimiento capaz de criticar el propio conocimiento, que permita discernir cuáles son las informaciones clave y hacerlas operantes, que muestre el destino individual, social, global de todos los humanos en la Tierra como núcleo esencial formativo de nuestra educación del futuro, en un mundo de la complejidad.
- Autonomía en el proceso de aprendizaje: Es la capacidad de evaluarse a sí mismo durante el proceso de aprendizaje. Se cuestiona en aspectos como: “¿cómo lo estoy haciendo? ¿Habrá una mejor manera?” Es cuando es independiente y motivado por sí solo para aprender.
- Liderazgo: Deberá afianzar características claras de liderazgo y de talento humano, no porque tenga la cualidad de “arrastrar” personas a la consecución de metas, sino porque posea la cualidad de integrar equipos de trabajo altamente comprometidos, donde cada persona sea consciente de lo que tiene para brindar al mundo.
- Capacidad para dialogar y trabajar en equipo: debe desarrollar una capacidad para escuchar, respeto y tolerancia, y una gran capacidad crítica por la otra persona (compañeros/as, profesor/a). Esto fortalece la tolerancia hacia la diversidad de criterios y opiniones.
- Ético y moral. Que construye juicios de valor de manera reflexiva a la luz de valores universales, y actúa conforme a ellos con una actitud positiva frente a las diferencias culturales, ideológicas, orientación sexual, y la identidad de género y filosóficas
- Capacidad de participación: actitud agresiva externa de participación cuestionamiento a sus docentes, a sus compañeros y compañeras, reacciones hacia las opiniones de los y las demás de forma respetuosa, postura crítica ante lo que dicen los textos. Así se involucra más a su proceso de enseñanza-aprendizaje. Esa habilidad recursiva les permite alzarse y evolucionar, enriquecerse a partir de su entorno a fin de lograr competencias que les posibiliten estar siempre ante cualquier contingencia en condiciones de elaborar sus propias estrategias. Les permite además que tengan herramientas para avanzar no solo profesionalmente, sino como seres humanos.
- Motivación y fuerte autoestima: Una autoconfianza apropiada, segura de sí favorece el establecimiento de metas mayores.
- Curiosidad e interés por la investigación: el estudiante del nuevo siglo no pueden ser consumidores de conocimiento de libros, docentes, Internet, entre otros. Debe ser consciente, en ese grado, de que puede generar nuevo conocimiento a partir del adquirido. También se entiende como un conjunto de conocimientos organizados, a fin de conocer la verdad de los hechos, y debe comprenderse que ella es un proceso continuo de búsqueda de conocimiento.
- Interés en las nuevas tecnologías de la información y la comunicación: puede propiciar un acercamiento entre docente y alumno/a y entre sus compañeros/as. La facilitación de la comunicación y del acceso a la información más amplia y actualizada son las dos grandes ventajas que estas tecnologías ponen al servicio del estudiante de hoy.
- Dominio de las técnicas de estrategias de aprendizaje: La globalización y el crecimiento han propiciado el progreso y el desarrollo de las tecnologías y sobre todo en el área educativa, lo cual ha hecho que en el mundo de hoy, los estudiantes y el resto de la sociedad requieren aprender a usar las herramientas que les permitan dominar las habilidades de aprendizaje esenciales para la vida diaria y la productividad en el campo laboral, es por ello, que son muchos los retos en la preparación académica y personal que deberá ser abordada a fin de construir nuevos conocimientos y constituirse en estudiantes efectivos de la sociedad actual.
- Empático y tolerante. Que se pone en el lugar del otro para entender las motivaciones, intereses y puntos de vista distintos. Que asume como riqueza la diversidad humana. Que se respeta a sí mismo y al otro, que entiende y comprende a aquellos que son diferentes (en estilos de pensar, capacidades, etnia, orientación sexual, identidad de género, creencias, lengua).
- Crítico y reflexivo. Que hace uso permanente del pensamiento divergente entendido como la capacidad de discrepar, cuestionar, afirmar y argumentar sus opiniones y analizar reflexivamente situaciones distintas.